miércoles, 28 de diciembre de 2011

Drive

Pre-estreno:
Drive (2011), Nicolas Winding Refn


Venir precedida de un premio tan importante como el del mejor director en el pasado festival de Cannes es una señora carta de presentación. Lo sospechoso era que el trailer desprendía un claro olor a cine comercial americano, aunque Cannes nunca le ha dado realmente la espalda que digamos. Lo que está claro (desde ahora y desde siempre) es que una cosa es el trailer y otra la peli. Y en esto los americanos son los indiscutibles reyes. Pero vamos de una vez a lo que cuenta.
El inicio es brillante. En 10 min, y sin que haya abierto casi la boca, sabemos perfectamente cómo es la vida de este protagonista sin nombre. Todo envuelto en buena música y un aire que enseguida asociamos más al buen cine indie que al de acción puro y duro. El guión contiene alguna de esas pequeñas perlas que, bien plantadas, nos anuncian lo que va a ocurrir sin que los diálogos lo indiquen específicamente.
Cine negro bien cosido. Pero tampoco especialmente original. Formado por piezas de un puzle que tenemos la impresión de haber completado ya anteriormente, pero eso no evita lo más mínimo que disfrutemos montándolo. Sobretodo en su segunda mitad. A partir del desencadenante y acelerador de la historia la cosa cambia, pues la primera mitad no está ni mucho menos a la altura de ese inicio prometedor. Asistimos a un buen thriller, cargado de todos los ingredientes que se le piden al género. O casi todos. No deja de sorprender que lo que más se eche en falta, precisamente en este caso, sea alguna escena más sobre ruedas. En eso nos deja algo frustrados, porque las que hay estan muy bien integradas en la historia, y te mantienen pegado a la butaca.
En fín, que se reconocen claramente huellas de Tarantino o de los Coen, pero el aroma es de Scorsese. Violencia, personajes oscuros, melancolía, descenso a los infiernos. Todos ellos elementos que nos traen recuerdos de algun clásico al volante del cine independiente americano. Y no precisamente de un glamuroso conductor de carreras, o de doblajes, sino (como ya habréis adivinado) de un inolvidable taxista.

PARA: incondicionales del cine negro
ABSTENERSE: meros perseguidores de cine de acción en la carretera

sábado, 17 de diciembre de 2011

Beautiful girls

DVDteca:
Beautiful girls (1996), Ted Demme


Hoy vamos de nostálgicos. La primera vez que la vi, tenía la edad de los protagonistas, lo que aumentó esa pequeña huella. En algunas ocasiones el cine te da uno de esos momentos en los que sientes que algo se conecta a ti. No quedas deslumbrado por una escena maravillosa, ni conmovido por la fuerza de una imagen, ni impactado por una historia. Simplemente, notas como algo, que llega sin alardes ni aspavientos, se acerca a ti y te toca dejándote como pensativo con una sonrisa tonta en la cara. Y entonces, en medio de la locura de nuestro día a día, entiendes que lo que te ha tocado es el tiempo. Te ha parado, a propósito, para recordarte que también pasa por ti inexorablemente.
En esta película de relaciones entre jóvenes que creen estar a punto de dejar de serlo, encontramos muchos de los tópicos del cine de pandilla americano, pero salvando y mucho las distancias con la gran mayoría del resto de películas. Aunque no deje de pecar de algo muy propio del cine americano: los sermones morales.
De entrada, tiene un reparto de lo más nutrido, reuniendo a una gran representación de actores y actrices que ya sumaban varios papeles previos como protagonistas. Muchos de ellos, además, caras muy conocidas. Quizás al que más destacaría es un secundario y no tan conocido, Michael Rapaport, que borda su papel, algo similar al que realizó en Amor a quemarropa (1993).
También destacaría que no me parece un film pretencioso. Toca principalmente el tema del compromiso de pareja al alcanzar "esa" edad crucial para la sociedad en la que vivimos. Y lo hace de una manera totalmente desenfadada, sin ponerse trascendental pero sin tomárselo a pitorreo. Sinceramente, creo que el resultado es bastante efectivo. Cuenta con varios diálogos con un punto de ingenio más que destacable.
Pero para mí, contiene una perla que concentrará para siempre en ella el recuerdo de toda la película. La Lolita de nuestra generación: el papel de Natalie Portman. Una auténtica joya, mágica. Algo a lo que solemos referirnos como química, pero que nunca nadie es capaz de explicar. Y así debe seguir.

PARA: Nuevos exjóvenes
ABSTENERSE: Consumidores de comedias americanas de pandilla de encefalograma plano

miércoles, 14 de diciembre de 2011

Jane Eyre

Cartelera:
Jane Eyre (2011), Cary Fukunaga


Lo primero que se terciaría ante una obra literaria adaptada por enésima vez, tanto para la gran como para la pequeña pantalla, sería una inevitable comparación. Pues lo siento. No había visto ninguna de las anteriores. Así que he asistido con ganas de reparar ese sano desconocimiento de la famosa obra de Charlotte Brontë. Insisto, no sé qué nivel alcanzaron las anteriores, pero me descubro ante ésta.
Creo que el primer esfuerzo que exige una peli de época es el de intentar no condicionarse por la indudablemente numerosa cantidad de películas de este corte que todos hemos visto. Desde ese ángulo diría que no impacta lo más mínimo. Comentario un poco cruel, porque el nivel de exigencia de hoy en día, tanto en el cine de ciencia ficción como en éste, es alto en lo que a dirección artística se refiere.
Tampoco me voy a detener en aspectos originales de la novela (partiendo de la base de que haya sido fiel). Sí me apetece destacar que es una historia de amor con mayúsculas, y de las golosas para ser contada en imágenes, lo que sin duda explica su repetida adaptación.
De su producción me quedaría con dos aspectos: fotografía y música. En el primero, llama la atención el manejo de la oscuridad. Muy coherente no sólo con la época, sino con el tormento de los personajes. Sin duda habrá influido la experiencia en este campo de su joven y talentoso director. En cuanto a la música, me parece simplemente de una gran elegancia. Nunca destaca especialmente, pero no deja de acariciar durante todo el film.
Y he dejado para el final mi mayor sorpresa. Conocía a parte del reparto. Como no, a la siempre espléndida Judy Dench, al ultimamente omnipresente Michael Fassbender y hasta al ex-niño bailarin Jamie Bell, de Billy Elliot. Pero a quien no conocía es a la Srta. Mia Wasikowska.
Este pedazo de actriz merece mención aparte. Con 22 añitos realiza una impresionante interpretación en un papel más que difícil, haciendo un alarde de emotividad contenida que, aunque obligados por el personaje, ya me gustaría ver en más de una actriz consagrada. Apuntaros este nombre porque la vamos a ver muchas más veces. Empezando por Restless, la nueva película de Gus Van Sant. Con ganas de verla.

PARA: Románticos puros
ABSTENERSE: Adictos a emociones animales de la saga Crepúsculo

martes, 6 de diciembre de 2011

Cube

DVDteca:
Cube (1997), Vincenzo Natali




Hay películas que disfrutan del interpretable mérito de ser un género en sí mismas. Yo creo que ésta lo es y en positivo.
Por descontado, no faltará quien la minimice como simplemente un thriller claustrofóbico y demás expresiones al uso, o incluso la menosprecie por las múltiples preguntas que deja sin respuesta, etc etc
En lo que no debería haber disparidad de criterios es en admitir que este tipo de ejercicios son lo que el cine necesita: explorar nuevas vías en todos sus vectores. En este caso el planteamiento y el universo en el que se desarrolla.
En lo demás tampoco es tan rompedora, pero la potencia de su mencionada singularidad le confiere un innegable interés. Y para más inri, haciendo alarde de una excelentemente gestionada economía de medios que no hacen sino concederle más mérito.
"Curiosamente", como todo sólido film, disfruta de uno de los fundamentos de toda película que se precie: unos personajes bien definidos y trabajados, correctamente interpretados.
En otro plano, más allá del ámbito de la historia que se narra, estarían las múltiples interpretaciones acerca de los paralelismos entre ese universo y la realidad. También eso beneficia a la película, independientemente de lo acalorado que pueda ser el debate.
Ojalá el mundo del cine se prestase sólo un poquito más a mostrar obras tan originales cómo ésta, en lugar de producir en serie segundas y terceras partes de productos infumables comercialmente exitosos. Precisamente, uno de los males de nuestro tiempo de la que esta peli se contagió, con una secuela en 2002. No creo que me equivoque si me la ahorro.

PARA: Buscadores de piezas únicas
ABSTENERSE: Buscadores de un cine racional

jueves, 1 de diciembre de 2011

Incendies

A la venta:  
Incendies (2010), Denis Villeneuve

Ayer volví a impactarme con la historia de Nawal Marwan. No parece surgida de una obra teatral. Sí parece una pieza descomunal nacida para la gran pantalla. No en vano, el director y guionista acordó con el autor de la obra escribir con libertad y el film cambia en mucho varios aspectos de la obra original, casi media película. El resultado es uno de los más impresionantes ejemplos de guión perfectamente explícito mediante sólo contadísimos diálogos. Algo parecida únicamente en ese aspecto a 2001, una odisea del espacio. En este caso, con menos música pero a su vez igual de evocadora.
Otro de los innumerables aciertos del film es su estructura. Partida en mil pedazos, como la vida de su protagonista, Villeneuve hila como un maestro de alta costura una narración que de tan bien trenzada parece lineal. Doble mérito cuando manejamos tan diversos personajes, parajes y fechas. Sinceramente, no entiendo cómo pudieron darle el último Oscar a la película de habla no inglesa En un mundo mejor, buena película, ya comentada en el blog, pero lejos de la dimensión de ésta. Pero ésa es una batalla perdida que no pienso perderme en entender.
En el aspecto artístico, es sorprendente cómo un cineasta de cultura tan alejada a la reflejada ha podido seleccionar semejante cantidad de emplazamientos y actores tan sumamente realistas. Uno siempre habría imaginado una película así filmada por alguién afectado más directamente por ese frente de conflicto mundialmente conocido y sufrido. Sin embargo, quizás sea esa visión "externa" la que ayuda a potenciar el aleccionador mensaje de la película: en la guerra sólo existe un bando, el del horror, y la vía para ponerle fin está en manos da cada uno de nosotros. Para construir ese mensaje, asistimos de manera pausada pero firme a un relato sobrecogedor de profunda y creciente carga emotiva, con una base circular.
En primer lugar, el círculo es la forma perfecta que mejor ilustra ese bucle de ira y desesperación que subyace en todo conflicto bélico. También representa el punto de apoyo sobre el que una madre explica a sus hijos los principios para cortar ese hilo que representa la espiral de violencia y odio contagioso. Y para mí también ayuda a resumir el inabarcable alud de sensaciones y sentimientos que esta película produce: una película redonda. Absolutamente inolvidable.

PARA: Verdaderos amantes del buen cine
ABSTENERSE: Exclusivos aficionados al cine de acción

martes, 29 de noviembre de 2011

Un método peligroso

Cartelera:
Un método peligroso (2011), David Cronenberg


No se puede negar que hay una adjetivo que casa bastante bien con Cronemberg: inquietante. Y también hay algo muy de agradecer en los directores que vienen de haberse labrado un cartel: el cambio de registro. Soy completo desconocedor de su época inicial, algo más de su época media, con La Mosca (1986) e Inseparables (1988), pero he celebrado claramente en su época más reciente ejercicios más alejados del cine fantástico, como Crash (1996), Una historia de violencia (2005) y Promesas del este (2007). Y es precisamente con éstas últimas con las que creo que comparte un nexo común que inevitablemente va unido a la edad: la reflexión sobre nuestros instintos más profundos y el descubrimiento de nuestra verdadera identidad.
La prueba es que en esta ocasión ha ido a por el padre y el hijo de esa corriente que nació con el siglo XX: el psicoanálisis, Freud y Jung. Pelicula de muy pocos personajes y localizaciones, no casualmente una adaptación de la obra tatral del mismo autor que firma el guión, Christopher Hampton. Densa en sus diálogos. De esas peliculas en las que uno estaría todo el rato dándole al pause para reflexionar sobre algunas frases. Es inevitable que falte ese minimo tiempo para digerir esos medidos diálogos. Pero aun así, en ningún momento se hace pesada ni tediosa, aunque cueste algo acostumbrarse a su ritmo al principio. Tampoco es fría, porque sabe solapar con auténtica maestría y dosificación las teorías de sus personajes con el viaje emocional que experimenta su protagonista, un regio Fassbender encarnando a Carl Gustav Jung. Eso sí, destaco el reparto al completo. Estan todos espléndidos.
Otro innegable atractivo del film es su imponente dirección artística. Verdaderamente exquisita toda la recreación de la época: localizaciones, interiores y vestuario están sobresalientes.
Y ya me diréis. A mi la peli me deja un sabor. En una época en la que el sexo masculino seguía pavoneándose de abanderar casi con total exclusividad los méritos del progreso, la mujer asomaba ya la cabeza de una manera sumamente poderosa. Los papeles de la mujer de Jung y de la propia Knightley son para mí los que contienen las mejores perlas. Muchos puros en boca y sermones algo fanfarrones, cuando en realidad son ellas las que mediante finísimos pero firmes hilos dominan el consciente y el subconsciente. Pura inteligencia.

PARA: Interesados en entender al ser humano
ABSTENERSE: Los que evitan el cine inteligente

viernes, 25 de noviembre de 2011

Cinco metros cuadrados

Cartelera:
Cinco metros cuadrados (2011), Max Lemcke


Seguro que estaremos de acuerdo en que las películas que decidimos acudir a ver al cine se empiezan a degustar antes de que se inicie su proyección. Nuestra mente empieza a llenarse de impresiones en las que influyen su ficha artística, su recorrido previo por festivales o el tema que aborda.
Este film cuenta con buenos actores, ganó el festival de Málaga y toca un tema sensible. Contaba además con el atractivo de ver en un papel dramático a un actor de exclusivo registro hasta la fecha en el ámbito de la comedia, como Fernando Tejero.
Y en esas que uno se da de bruces con el guión. ¿Dónde está el supuesto ingenio u originalidad que hoy en día parece imprescindible para poder convencer a las productoras? En este caso, el resultado es, exactamente, lo que uno espera ver. Con lo que me voy a ahorrar spoilers, o no, según se vea.
No podemos, en pleno siglo XXI, contar y narrar una historia de nuestra realidad social y económica como si estuviésemos en los años 60 o 70. Algunos personajes están patéticamente dibujados. No digo que no puedan ser reales, sino que carecen de la profundidad mínima exigible para un cine como el nuestro, que lleva ya mucho tiempo exhibiendo una destacable calidad. Por no mencionar otros papeles metidos con calzador.
Fernando Tejero no está mal en su nuevo registro, pero en ningún caso lo destacaría. Únicamente salvaría a un Emilio Gutiérrez Caba que sí se mueve con indudable soltura en su papel de promotor chorizo "made in spain".

PARA: Nostálgicos del cine de los 60
ABSTENERSE: Admiradores del nuevo cine español

miércoles, 23 de noviembre de 2011

VI Concurso de Guiones Ciudad de Segovia 2011


Qué gran jornada!
Hoy he recogido en Segovia el premio como uno de los dos finalistas del concurso internacional de guiones Ciudad de Segovia Fundación Mapfre en su VI edición.
Agradezco desde aquí lo acogedores que han sido todos y todas los involucrados en esta gran muestra de cine europeo. Sobretodo, la concejalía de cultura del Ayuntamiento.
Y también es momento de acordarse del lugar donde nació y creció este guión, Taller de Guionistas. Desde aquí un abrazo grande a mi maestro, Juan Carlos Sánchez-Marín, sin el cual no habría podido ni soñar un día como el de hoy.
Mis compañeros, Jaime Bartolomé (ganador) y Diego Soto (finalista), y yo hemos recibido, además del premio (la escultura del As de Segovia), muchísimo apoyo por parte del jurado, encabezado por Jaime Chávarri, e integrado también por otra cara conocida, Emilio Gutiérrez Caba. Y también hemos tenido el lujo de poder departir con Unax Ugalde y David Pinillos, el último Goya a director novel.
Todos ellos muy amables, y con los que hemos compartido una gran comida en el restaurante José María.
Ahora ya sólo falta que el guión, "Sin valor", pueda ver la luz en un futuro bien próximo.
¡A por ello vamos!

Con el director de cine y presidente del Jurado, Jaime Chávarri, El alcalde de Segovia, Pedro Ahuertes, y el actor Emilio Gutiérrez Caba.

Prensa:




lunes, 21 de noviembre de 2011

Código Fuente

Codigo fuente (2011), Duncan Jones


Cíclicamente deambulan por los cines productos como éste. La fórmula está clara: efectos especiales, guión apoyado en éxitos del pasado y una cara conocida. La verdad es que ignoro si son rentables o no, pero no podemos negar que esta combinación llena un hueco en el cine. El hueco que rellenan todos aquellos que buscan distracción, sin la más mínima intención de arriesgarse a topar con una obra maestra del cine independiente, ni a estrujarse el cerebro.
En lo primero salen airosos. En lo segundo tropezarán. Y es que los jueguecitos con los viajes en el tiempo están tan trillados que ahora parece que dependemos de complicar el mecanismo por el cual realizamos dichos viajes. Dudo que la simple mayoría de espectadores haya entendido la rocamblesca idea en la que se basa el film para explicar esa puerta que nos abre la posibilidad a modificar el pasado, y con ello el futuro. Pero no es eso lo peor. Resulta inexplicable que alguien que (suponemos) se parte el coco urdiendo semejante trama, plantee un final tan someramente ingenuo, por no decir ya light o directamente cursi.
Lo dicho. Para un día de lluvia en el que deseemos aparcar una parte del cerebro, porque te piden que uses la otra. Aunque podéis apagarlo todo, francamente.

PARA: Consumidores de cine comercial en serie
ABSTENERSE: Fanáticos de Tomates verdes fritos

viernes, 18 de noviembre de 2011

Un Dios salvaje

Un Dios salvaje (2011), Roman Polanski

Pelicula 100% de guión, por cierto, del propio Polanski y de su autora original, Yasmina Reza.
Los que me conocen saben que me gusta este tema: nos llenamos la boca hablando de la crisis de valores de las nuevas generaciones cuando al rascar un poquito en nuestra superficie salta enseguida la piel y asoma el animal...
Nunca me ha convencido del todo eso de ver una obra de teatro en una pantalla. Aun así, hay que admitir que se disfruta viendo a estos actores. La peli pasa volando. Tal cual: 1h15min !
En cuanto a su desarrollo, no hay mucho misterio en el tinte que van cogiendo los acontecimientos. Quizás lo más original sea ese juego buñueliano que les impide despedirse para no dejar el más mínimo resquicio abierto, sin ser conscientes (sólo al principio) de que les aguarda su particular "angel exterminador".
Es, sin duda, un ejercicio de mérito encontrar los recursos para mantener un único diálogo a 4 bandas durante tanto tiempo sin que el interés decaiga. Invito al que lo dude a que lo intente.
Me quedo con Waltz, ultimamente en estado de gracia. Winslet sobria. La Foster ya empieza a rechinar. Y Reilly hace de Reilly. Particularmente, no me resulta creible el matrimonio Foster-Reilly.
En fin, nunca he sido fan de Polanski, pero tb es verdad que nunca me ha decepcionado.

PARA: Simpatizantes con el cine estilo Woody Allen
ABSTENERSE: Impacientes


El ultimo gran día (Get Low)

El ultimo gran día (Get Low), Aaron Schneider



Opera prima del director de fotografía de Titanic. Está (literalmente) a millas de distancia de esas latitudes, dado que nos sitúa en uno de los entornos 100% yankees: pueblito perdido de la america profunda.
De entrada, lo que sorprende es que un film con este cartel no haya tenido el más minimo lanzamiento comercial, aunque tb es verdad que podría no haberme enterado perfectamente...
Sin duda, ver juntos a estos 3 cracks era motivo sobrado como para meter la nariz, oportunidad que agradezco a Filmin.
Tras un buen comienzo, la peli parece que se va a desmoronar debido a uno de los más arriesgados movimientos que puede acometer un guión, o un director: el cambio de tono. De una aparente promesa de western crepuscular  gira a una casi comedia al más puro estilo Coen. Dicho giro de cintura casi arruina la peli a mi entender, subrayado por un actor especializado en ese tono: Bill Murray.
Y para salir de un mal giro, lo mejor es otro giro. La segunda mitad es un sólido drama que cuenta con tres elementos a su favor, que consiguen más que salvar la pelicula: la fotografía (hubiese sido grave lo contrario), las interpretaciones (a sus pies Sr.Duvall) y la ocultación de la información.
El misterio que envuelve al protagonista adquiere un halo especial en la segunda mitad. ¡Qué importante es dosificar bien la información al espectador! En ese tramo, juegan un papel destacable dos personajes: la renacida Sissy Spacek ! y el reverendo Jackson ¿todos los reverendos negros se llaman Jackson?
Total, que acaba consiguiendo nuestra complicidad hacia un final, eso sí, algo ñoño. Pero vale la pena.

PARA: Quien quiera disfrutar con tres actores veteranos
ABSTENERSE: Prejuiciosos que descartan una peli en 10min








sábado, 12 de noviembre de 2011

Another year

Another year (2010), Mike Leigh


No se puede negar que el Sr. Leigh sabe lidiar con las relaciones humanas. Basta con echar un vistazo a su filmografía... y más allá, con experiencia en el teatro y la tv.
Sólo por la trenza que construye con los personajes partiendo de sus terrenales vidas ya vale la pena dedicarle tiempo. Y es una lástima que el público no se eche más a menudo en sus redes, aunque sea lógico: la mayoría de la gente va al cine a desconectar, mientras que su cine no tiene nada de desconexión con nuestro mundo cotidiano.
La película nos habla de uno de los quistes sociales precisamente más habituales: la soledad. Y lo hace, curiosamente, desde un ángulo especial: el de la amistad. Un tipo de amistad al que comunmente dotamos de  mayor credibilidad cuando sus protagonistas cuentan con una cierta edad.
Careciendo del ritmo y del hilo que buscamos habitualmente en historias con línea argumental, consigue acompañarnos de manera entrañable durante todo su metraje, que sobrepasa las dos horas, como si estuviesemos dando un paseo. Y a ello contribuye con acierto la elección de fragmentar ese año de la vida de nuestros personajes en las cuatro estaciones. De hecho, casi cuatro veladas (y alguna más) que reflejan la temperatura de sus estados de ánimo al unísono con la de la propia climatología. Todo gracias a unas convincentes interpretaciones, aunque rechina reconocer en ellas un acting por momentos demasiado teatral. No por los ademanes, sino por la característica complicidad con el público de escenas en las que las caras de un personaje se suponen invisibles a los ojos de los otros. 
Pero donde creo que patina Mike, como guionista, es en la asociación de soledad con hogar unipersonal. Vamos, que todo aquel que no llegue a una edad viviendo en pareja está condenado. Para mi gusto se pasa tres vueltas. Una pareja de protagonistas por momentos demasiado idílica y sin la más mínima fisura, unos amigos solteros sin luz al final de su tunel, y para remate, un hijo que encuentra en la pareja la estabilidad que entendemos le "salvará" de un incierto futuro.
La sociedad en la que vivimos es agriamente rica en modelos de soledad, obviamente, incluyendo a gente que no vive sola. Y curiosamente, el arranque del film lo protagoniza una mujer, anecdótica en la historia, que representa a la perfección a esa inmensa realidad social, pero a la que nuestro director decide olvidar. Cosas de la vida.

PARA: Seguidores del cine social al más puro estilo británico
ABSTENERSE: Lobos solitarios

jueves, 10 de noviembre de 2011

Invictus ¿Es hoy un jueves cualquiera?

Invictus

En la noche que me envuelve,
negra como un pozo insondable,

doy gracias al dios que fuere

por mi alma inconquistable.

En las garras de las circunstancias
no he gemido ni llorado.
Ante las puñaladas del azar
si bien he sangrado, jamás me he postrado.

Más allá de este lugar de ira y llantos
acecha la oscuridad con su horror,
no obstante la amenaza de los años
me halla y me hallará sin temor.

Ya no importa cuán recto haya seguido el camino,
ni cuántos castigos lleve a la espalda,

soy el amo de mi destino,

soy el capitán de mi alma.


William Ernest Henley (1849–1903)


Video del poema en la película de Clint Eastwood, Invictus (2009)


sábado, 5 de noviembre de 2011

La voz dormida

La voz dormida (2011), Benito Zambrano





















Cuando nos reabren una ventana a episodios tan crudos de nuestro pasado siempre consiguen generar una sensación de infinito respeto hacia los miles y miles de personas que han tenido que sufrir para que hoy nosotros estemos aquí. Sea cual sea el drama humano, y se situe donde se situe, tanto temporal como geográficamente.
Y si, además, está bien producido e interpretado (en algunos casos) todavía es mayor el efecto. Muy interesante María león.
Pero dejando aparte ese punto, de lo que se trata aquí no es de hablar sobre nuestra historia sino sobre la película.
Benito Zambrano tenía sobrado crédito como para generar una expectativa, ganada sobradamente con Solas (1999), y menos (pero a mi me encantó) con Habana Blues (2005).
Sin embargo, cinematográficamente, he salido del cine algo decepcionado. Y digo "algo", porque la cuestión histórica por sí sola permite mantener un mínimo interés durante toda la película. El problema es que en clave de cine no aporta nada.
De entrada, carece de interrogantes que nos puedan generar interés en su avance. Podemos prever toda la peli desde el min 15.
La condensación de excesivos diálogos provocada por la esclavitud de querer reproducir el máximo contenido de la novela no deja respirar lo suficiente, ni a los personajes ni a la propia película. Con toda la carga dramática que la inunda, los personajes no llegan a tener la profundidad que deberían, y eso es un error. No puedo entender como alguien capaz de jugar con los silencios y las miradas de Solas, lo haya perdido 12 años después.
Aun así, no es lo más flojo de la peli. Sí lo es el tratamiento que se hace de todos los papeles que representan al bando "contrario". El público de hoy en día tiene la suficiente madurez como para digerirlos fílmicamente en su rol sin necesidad de entrar en estereotipos tan caricaturizados que, independientemente de nuestras creencias políticas, debemos admitir como rebajadores de la calidad de la pelicula. Y no digo que no existiesen en realidad. Estoy absolutamente convencido de que así fue, y en todas las guerras del mundo. Es la condición humana, desgraciadamente. Pero para verlos por enésima vez en una película... Aunque quizás eso se le pueda achacar a Dulce Chacón y no a Benito.

domingo, 30 de octubre de 2011

Las aventuras de Tintín. El secreto del Unicornio.

Las aventuras de Tintín. El secreto del Unicornio (2011), Steven Spielberg


Es curioso como nos llegamos a meter en algunos debates ligados a grandes lanzamientos. El último el de Tintín.
Y con todo ello lo único que conseguimos, evidentemente, es inflar la bola de nieve para deleite de las productoras y distribuidoras que con ello alimentan sus fastuosas campañas.
Que si es fiel al original. Que si está americanizado. Que si es Indiana Tintín. Que si es Tintín Jones. Bla bla bla.
Por mucho que se asista al estreno, es casi imposible acudir a su visionado sin estar ya condicionado, algo que históricamente ocurría en contadas ocasiones, hasta la llegada de las redes sociales.
Pues eso, a veces más ruido que nueces. Lo que he visto hoy es un film de exquisita y avanzada animación que respeta la historia original. Una animación que parece que hoy en día deba obligatoriamente ir acompañada de eso: animación y más animación. Es como si la calidad tuviese que aderezarse con un ritmo desbordante que asegure su dosis de hiperactividad a cada niño. Y aunque sigue llamando la atención esta sorprendente técnica estrenada con Avatar, es inevitable que ya no sorprenda tanto. Por no hablar del 3D.
Y en cuanto a la historia y a su personaje, encuentro fuera de lugar el debate, sinceramente. Me tragué prácticamente todos los comics en su día y me parece que lo que ofrece la pelicula es una obligada adaptación al código del cine comercial actual, nos guste o no.
En definitiva, que siempre celebraré más fondo que forma. Pero al final lo que importa siempre es el gusto que te deje en la boca: una peli entretenida.

viernes, 28 de octubre de 2011

En un mundo mejor

En un mundo mejor (2010), Susanne Bier


La última ganadora del Oscar a película de habla no inglesa aborda un tema desgraciadamente de actualidad imperecedera: la violencia que llevamos dentro.
Aunque recientes y desgraciados hechos en Noruega lo pongan en duda, la sociedad escandinava es uno de los paradigmas de sociedad avanzada, modelo del estado del bienestar. Por eso es interesante que este ejercicio parta también desde su interior. A eso debemos añadir el contraste que la directora plantea al contraponer tal marco con el de otra sociedad en sus antípodas no geográficas: África.
El resultado es un film sobrio que combina unos pocos elementos familiares para sembrar el consabido debate de si la violencia na ce o se hace.
Es acertada la figura de un médico comprometido como nexo de unión entre ambos mundos. La cadencia podrá gustar o disgustar, pero encaja muy bien con el tono y el efecto reflexivo que desea provocar.
Sin embargo, es una lástima que su desarrollo se muestre tan previsiblemente desde demasiado pronto. Los personajes están bien dibujados y, a su vez, las dos familias bien cruzadas. Pero a medida que avanza la pelicula no se ha sabido sacar más jugo a dicho planteamiento.
Bien rodada e interpretada, pero desaprovechada. 

viernes, 21 de octubre de 2011

No habrá paz para los malvados

No habrá paz para los malvados (2011), Enrique Urbizu


A lo mejor es que es mi género favorito, pero qué satisfacción el poder encontrar buen cine negro made in spain. Una auténtica vergüenza que se fuese de San Sebastian a dos velas. No puedo estar más de acuerdo con Carlos Pumares.
Hay varios aspectos dignos de destacar. Es obvio. No por ello vamos a dejar de ensalzar el papelón del señor Coronado. Es de esos papeles que elevan a los actores varios escalones por encima y los catapultan hacia el selecto grupo de memorables. Ya estaba bien en La caja 507 del mismo Urbizu. Pero es que en esta ocasión su rocambolesca caracterización y su madurez combinan a la perfección.
Quizás como contrapeso, su protagonismo es tal que deja algo cojos al resto de interpretes, lo que "desequilibra" algo la peli en ese aspecto. Aunque a mi me gusta Helena Miquel como juez.
En su conjunto la pelicula es más que sobria. Hay que celebrar que nuestro cine esté a esta altura.
Pero me quiero detener especialmente en lo mío: el guión.
Considero un infrecuente pero mayúsculo acierto el juego que nos presenta Urbizu. Sin querer desvelar nada, la acción entra a las primeras de cambio y nos sumerge velozmente en una trama que nos atrapa sin pestañear. Pero lo curioso, y ahí viene lo reseñable, es que manteniendo el mismo grupo de protagonistas la trama mute, casi sin darnos cuenta. Muta pero crece, y nuestro protagonista adquiere una nueva dimensión que, aun así, no cambia su inevitable destino.
Lástima que la  precoz promesa de acción se diluya en el desarrollo el film. Demasiada paz quizás para los malvados. Se echa de menos más pólvora, más confrontación, aunque no esté teñida de rojo.


viernes, 14 de octubre de 2011

Mientras Duermes

Mientras Duermes (2011), Jaume Balagueró


Le sentaban mejor a Balagueró sus propios guiones. No es que la película falle en nada importante, sino más bien que no destaca precisamente en nada. Es una pelicula ya vista.
Uno tiene la sensación de estar revisitando un camino conocido. Hasta la misma Atracción fatal. Hay hasta niña maquiavélica, recurso que empieza a ser recurrente.
Personajes previsibles y muy planos. Se merece un mejor papel Marta Etura.
Lo que no deja de ser un placer es ver al señor Tosar, que el solito aguanta la pelicula. Poca cosa más. Me quedo con la escena en la que César intenta salir del piso, de auténtico thriller.
Por lo demás, no deja de ser un drama con tintes de psico-thriller que no llega a serlo. Es lo que más me ha sorprendido.
Lo dicho: nada criticable, pero sin aportar novedad alguna al género. Ni sorprende ni innova. Esperaba más de su director.




lunes, 10 de octubre de 2011

Verbo


Verbo (2011), Eduardo Chapero-Jackson

Esta mañana he tenido uno de esos privilegiosde los que uno disfruta de vez en cuando: ver una première en un festival, el de Sitges.
Es una gran noticia que en este país se hagan también películas así. No ha defraudado. Bueno, me quedo corto. Creo poder decir que la película ha gustado bastante, teniendo en cuenta que se dirige aun público adolescente que no era mayoría.
El sentido del film es fácilmente resumible, pero su factura es para quitarse el sombrero.
Es de agradecer en los tiempos que corren, que se empleen tantos medios en transmitir un mensaje inspirador a los jóvenes: déjate de quejas y/o de aislamientos y lucha. Todos tenemos anhelos. Todos. Alcanzar los tuyos está al alcance de tu mano.
Ahora bien, el reto es precisamente transmitirlo para que llegue a ese público tan especial.
Y creo que uno de los grandes méritos de la película es que provocará reconocimiento por la singularidad de su lenguaje y sutono.
Como decía, aun adoptando un sentido inequívocamente dirigido a los teenagers, utiliza el formato de fábula urbana con una combinación de estilos ciertamente arriesgada pero efectiva. Desde el manga hasta el gore, bien trenzados, consiguendo un resultado más que atractivo, al servicio del mensaje.
Mi enhorabuena a todo el equipo de esta peli.

miércoles, 5 de octubre de 2011

El árbol de la vida

El árbol de la vida, Terrence Malick (2011)



Aproximadamente una vez al año recuerdo que el cine, como la vida, puede ser maravilloso, como decía Montes. Normalmente, una película te sorprende cuando no te has creado una expectativa previa. Pero en este caso ríos y ríos de tinta han corrido para ensalzar o enterrar esta película. Así que acudí al cine con un cocktail de expectativas. Y todo voló por los aires. Yo incluido. ¡Qué espectáculo! ¡Qué emoción! ¡Qué película!
Lo primero que me vino a la cabeza al terminar fue un sentimiento de lástima hacia mucha gente que no la podrá disfrutar. Unos por no poder verla y otros aun pudiendo verla.
¿A qué me refiero? Daré un pequeño rodeo. Me refiero al hecho de estar receptivos. Ya demostró Masaru Emoto el poder receptivo del agua. Y vale recordar que somos agua en un 75%. Sus mensajes del agua demuestran hasta qué punto somos sensibles a captar… si nuestra mente no lo impide.
Y Malick nos da la oportunidad de captar algo inmenso, pero no por ello indescifrable, aunque se atreva a tocar el tema más complejo que podemos imaginarnos: la vida.
Y ahí entramos nosotros. No se puede ir a ver esta película con una venda en los ojos y tapones en los oídos.  Debemos ir abiertos, receptivos, plenos y dispuestos a darnos un baño de consciencia que alcance lo más profundo que hay en nosotros: nuestro ser.
Al entrar en el cine, repito: el CINE (allá él quien se descargue viéndola de otra manera) hay que dejar la mente aparcada en el guardarropía. No hace falta pensar. No debemos pensar. Los millones de sentimientos que llegaran a nuestro ser ya se encargarán de provocar pensamientos aun mucho tiempo después de haber visto la película. Pero vamos a la película.
Lo que hace Malick es abordar el tema desde sus dos extremos: la creación y el ser humano. En mi opinión, el primer megamensaje que da la película se produce alrededor del minuto 20. Contrasta a una familia rota por la pérdida de un ser querido con la inmensidad de todo lo creado. Y parece que nos susurre: “Si no has pedido explicaciones por TODO lo que se te ha dado, no las pidas por lo que se te quite”. Y, a su vez, proporciona el tamaño de nuestros dramas: literalmente, no somos nada comparados con la vida en toda su extensión. Por lo tanto, ¿qué hay que merezca tanto tu atención como para no hacer lo único que debes hacer? Vive.
Y en ese instante, también aparece un plano maravilloso. Una familia de dinosaurios ha perdido a uno de los suyos, que agoniza. La llegada de un depredador nos provoca la clásica impresión de que se impondrá la ley de la evolución, la ley del más fuerte. Pero el depredador no ejerce su papel. Incluso en un marco tan salvaje aparece la compasión. Aparece el amor. Y por si fuera poco, relaciona esa escena con otra más adelante, en la que los niños juegan en ese mismo punto del río, millones de años después.
Mi interpretación de la familia protagonista es muy personal. El padre es el ser humano, que se complica su existencia autoimponiéndose un corsé en forma de normas y/o formas para organizarse y regir su destino, olvidándose de lo más importante: vivir. La madre es eso: la madre naturaleza, la que da la vida. Vive cada momento. Desde sentir la brisa en su cara, el agua de un aspersor en sus piernas o el amor que da indiscriminadamente. Y los hijos vuelven a reflejar los dos extremos de nuestras capacidades: empaparnos de vida (el rubio) o contaminarnos con nuestro corsé (el mayor). El debate es infinito: “El hombre es bueno por naturaleza” Rousseau, o “El hombre es un lobo para el hombre” Hobbes.
Y los papeles de la familia confluyen en el hijo mayor ya en su etapa madura. Se da cuenta de todo. Entiende y capta el sinsentido de la vida de la mayoría de los humanos. Su vida. Sin embargo, tampoco es tarde para él. La vida es un ciclo infinito. El encuentro final entendido como posterior a la muerte, tras cruzar esas puertas, sigue dando esperanza. En esa playa, en esa orilla entre la tierra y el mar, entre la vida y la muerte, hay encuentro y paz.
Hay algo que me impresiona aun más. La explicación a todo encaja en cualquier mentalidad. Tanto si creemos en el origen divino como en la pura naturaleza, la película nos encaja. Ya lo menciona en una frase bastante al principio, pero no encuentro lógico que surja de unas “monjas”.
Y lo más impactante de la película: sus imágenes. Aun no participando, ni queriendo participar de su sentido ni de la interpretación que cada uno haga, la película es un espectáculo continuo. Es más que llamativa la desbordante sucesión de imágenes mágicas. Tuve el placer de verla en el cine Verdi en HD y la boca no se me cerraba ante tanta maravilla.
Aunque sepa mal en obras maestras de este calado, nunca debemos dejar de aportar nuestra visión crítica. No entiendo porqué tiene que durar 2h15’. Es innecesario. La parte central, la que se centra específicamente en la familia, es redundante. Bajo mi punto de vista se centra demasiado en el hijo mayor, y demasiado poco en ese mismo personaje en su faceta adulta, que es precisamente cuando podría calar más su reflexión.
Para acabar, creo que esta película debe ayudarnos a tomar conciencia de que antes que cualquier otra cosa somos vida. Una vida constante, inabarcable y eterna. Y somos un potencial infinito que nunca deja de crecer, de dentro hacia fuera. Siempre en ese sentido, como le gusta recordar a una persona muy inspiradora que entenderá como pocos el mensaje de esta película: Antonio Jorge Larruy, desde su Espacio Interior.
Gracias Antonio por haberme ayudado a disfrutar de este espectáculo. Del espectáculo de la vida.
Y gracias Alberto por insistir. Gracias hermano.


sábado, 1 de octubre de 2011

Somewhere

Somewhere, Sophia Coppola (2010)


Qué pena que esta chica malgaste su talento de esta manera. Alguien que se estrena con una maravilla como Lost in translation no puede pocos años más tarde hacer este bodrio.
Es como si se hubiese contagiado de una cierta corriente de gente sin criterio a quien le gusta clasificar peliculas frikies y tediosas bajo la desacreditada etiqueta de cine Indie.
No necesitamos un largometraje para saber lo vacías que estan algunas estrellas de cine. Tal mensaje no justifica la inversión, por pequeña que sea, si se trata de esta manera. No necesitamos 97 minutos de metraje tedioso para ponernos en situación.
La pretendida emotividad del final no salva los muebles, aunque ayuda a justificar sólo tenuemente la pelicula.
Quizás ha pensado que la mejor manera de reflejarlo era con una película a imagen y semejanza de su protagonista: vacía. Sophia, ¡vuelve por favor!

jueves, 29 de septiembre de 2011

Libro El guión hablado


Transcribo abajo la nota emitida por Taller de Guionistas con motivo de la presentación de su nueva editorial de la productora.
Mi especial mención para EL GUIÓN HABLADO, de Juan Carlos Sanchez-Marín, que pronto se va a convertir en una obra de referencia.
Su formato es muy atractivo, ya que el autor ha convertido en explicaciones en primera persona las entrevistas con un gran puñado del nuevo talento creador de la industria cinematográfica en España en lo que llevamos de siglo.
MUY recomendable.


Entrevista al autor en La Finestra Digital:

                                


La Fundación Taller de Guionistas inaugura editorial

Y lo hace, como no podía ser de otra manera, con dos libros dedicados al guión, disciplina que imparte en sus aulas desde hace casi 20 años.

La presentación se llevó acabo ayer en la Filmoteca de Catalunya, con la presencia de la ministra de cultura, Ángeles González-Sinde, el secretari de cultura de la Generalitat, Xavier Solà, la Presidenta del Taller de guionistas, Mar Targarona, y de Juan Carlos Sánchez- Marín y Enrique Ros, respectivos autores de las obras publicadas.

SINOPSIS DE LOS LIBROS:

EL GUION HABLADO. CONVERSACIONES CON GUIONISTAS Y DIRECTORES DEL S.XXI
Autor: Juan Carlos Sánchez Marín.Con la colaboración de Jordi Picatoste

"El guion hablado" intenta, a partir de conversaciones con guionistas y directores, hacer una reflexión general sobre el guión en España y, de una manera más concreta, conocer el proceso de escritura de películas que, o bien han significado un éxito de público y taquilla, o bien han constituido una forma autoral, libre y esperanzadora de enfrentarse al medio en nuestro país.

Guionistas de la altura de Isaki Lacuesta e Isa Campo, Jaume Balagueró, Eduardo Chapero-Jackson, Cesc Gay, Judith Colell y Jordi Cadena, Daniel Sánchez Arévalo, Jor ge Sánchez-Cabezudo, entre otros, explican de primera mano cómo han gestado sus películas.


NO ES TV. LAS SERIES DE FICCIÓN EN LA ERA DE LA POST-TV
Autor: Enric Ros

"It 's not TV" es un ensayo de ensayo, un análisis transversal con el objetivo de revisar los mecanismos narrativos, los recursos dramáticos y el lenguaje audiovisual de la mejor ficción televisiva contemporánea, una invectiva a la televisión más conformista y una defensa apasionada de una post-televisión.Su creatividad, exigencia lingüística y método de recepción la ha alejado radicalmente de las convenciones del propio medio para permitirnos soñar con la televisión del futuro.

El libro analiza el universo de series de culto como Twin Peaks, The Wire, Lost, Los Soprano, El Ala Oeste de la Casa Blanca, Mad Men, entre otros.

miércoles, 14 de septiembre de 2011

Fresas salvajes

Fresas Salvajes, Ingmar Berman (1957)


Mientras la veía hace pocos días en @filmin me preguntaba si no se sobrevalora a veces a los supuestos genios del cine... hasta que acabé de verla.
No es fácil tratar un tema como el ocaso de una vida. Y menos aún hacerlo sin sentimentalismos ni "musiquitas".
Lo que hace Bergman en esta película es inocularnos una profunda sensación de añoranza por el tiempo pasado, PERO sin que nos demos cuenta. Incluso me atrevo a decir que en algunos momentos es aburrida.
Y al llegar al final de la película, como el viejo profesor al llegar al final de su vida, las diferentes piezas de su vida cobran un sentido especial y, por arte de magia (o sea de clase) las conversaciones que ha mantenido con los demás personajes despiertan en nosotros esa sensación de nostalgia que él experimenta.
Esta película no estará entre mis favoritas. No creo que la tenga tan presente. No me impresionó de entrada. Pero ahora tengo la sensación de haber recibido una clase maestra que quizá me haga recordarla algún día. Espero que dentro de muchos años.